La reunión tuvo lugar en la capital de Catar, en el contexto del Foro de Doha con el objetivo de discutir soluciones posibles ante la escalada de tensiones en Siria.

«Reafirmamos firmemente nuestro mensaje sobre la integridad territorial y la soberanía de Siria», así lo afirmó el canciller ruso, Serguéi Lavrov, en nombre de los participantes en el formato de Astaná en la reunión de Doha (capital de Catar).

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Junto a los ministros de Asuntos Exteriores de Türkiye e Irán (países garantes del Proceso de Astaná), Lavrov pidió este sábado el fin inmediato de las hostilidades, así como el inicio del diálogo entre el gobierno y las fuerzas legítimas de la oposición.

El jefe de la diplomacia rusa insistió en la necesidad de implementar plenamente la Resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU. “Lo más importante no es decir algo nuevo, sino implementar lo que firmamos”, señaló.

De acuerdo con Lavrov, las fuerzas aéreas rusas en Siria continúan apoyando al Ejército en la eliminación de los terroristas. En tanto, responsabilizó a los Estados Unidos por los desastres que suceden en las naciones de Medio Oriente.

Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Aragchi, ratificó que existió un “acuerdo entre todos los participantes en la reunión de Astaná en Doha sobre la necesidad de poner fin a la guerra en Siria y respetar su soberanía e integridad territorial”.

En esta ocasión, el encuentro de diplomáticos de los países participantes en Astaná se reunieron en la capital qatarí al margen del Foro de Doha en medio de una escalada de tensiones en Siria.

Desde 2017, Astaná constituye una plataforma que reúne a Rusia, Irán y Türkiye (garantes del proceso de solución de la crisis siria), así como a representantes del Gobierno y la oposición sirios, miembros de Naciones Unidas y a países observadores (Jordania, Líbano e Irak).

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